¿Sabes cuál es la farmacia más antigua de Europa?

Desde hace cuatro siglos persiste esta maravillosa farmacia en el centro histórico de Florencia. Concretamente se encuentra ubicada en una parte del convento iglesia de Santa María Novella y su nombre deriva de la plaza homónima, una de las más amplias de la ciudad.

Fue fundada en 1221 por unos frailes dominicos, al poco tiempo de su aparición en Florencia. Allí preparaban medicamentos, bálsamos, pomadas, jabones, ungüentos y elixires con las hierbas medicinales que cultivaban en el huerto del claustro, y que utilizaban para la pequeña enfermería del convento.

Con el paso del tiempo observaron la eficacia y la gran demanda de dichos productos, y decidieron abrir la farmacia al público en el año 1621. El duque de Toscana concedió a la farmacia el título de Botica de Su Alteza Real.

Más tarde, en el siglo XVIII la fama de la farmacia llega hasta a Asia. A partir de 1866 y con la desamortización de los bienes de la Iglesia Católica producida en Italia, la farmacia pasó a ser propiedad del Estado y éste cedió su utilización al sobrino del último fraile director, de nombre Cesare Augusto Stefani. Desde entonces la dirección y propiedad se ha mantenido en la misma familia.

Lo que comenzó siendo una farmacia de la época se fue complementando con productos más relacionados con la belleza, perfumes y ungüentos para diferentes usos. Hoy en día se ha convertido en la tienda-museo del perfume por excelencia para los amantes de las fragancias, y una visita obligada de la ciudad.

La actual perfumería guarda en sus salas auténticas joyas artísticas, frescos, decoraciones y antiguos utensilios de farmacia, vitrinas y cientos de frascos llenos de historia. En definitiva una amplísima selección que llega a fascinar incluso al público más exigente.

Cada uno de los productos elaborados tiene su propia biografía. Uno de los más antiguos es la fragancia Acqua della Regina (Agua de la Reina) que según historiadores fue preparada por los monjes para que fuera utilizada por la reina de Francia Catalina de Médici. Aún se sigue fabricando este perfume con los mismos ingredientes originales y sigue siendo uno de los productos emblema de la firma.

Otros productos estrella son los jabones impresos y envueltos a mano, con técnicas ancestrales y minuciosamente experimentadas, fabricados con sustancias naturales y sin añadidos químicos

Las materias primas son de la más alta calidad y todavía utilizan los mismos procedimientos artesanos de antaño para elaborar sus productos.

En definitiva, una autentica maravilla para todos los sentidos.