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¿Qué es el lumbago?

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¿Qué es el lumbago?

Denominamos dolor lumbar, lumbalgia o lumbago al dolor que se localiza en la zona de la espalda situada entre las últimas costillas y la zona glútea...

Denominamos dolor lumbar, lumbalgia o lumbago al dolor que se localiza en la zona de la espalda situada entre las últimas costillas y la zona glútea.

Tipos de lumbalgia

Según las causas del dolor nos encontramos con dos tipos de lumbalgia:

Lumbalgia no específica: Corresponde al 80% de los casos, donde no se llega a identificar claramente qué origina el dolor. Su duración es limitada y no presenta ningún riesgo para el paciente. Es un dolor de tipo mecánico y se debe a la lesión de músculos o ligamentos.

Lumbalgia específica: Es de causa conocida y el dolor sería el síntoma de una enfermedad como la osteoporosis o la hernia de disco, entre otras.

Además, según su duración puede haber lumbalgia aguda (dolor de menos de 6 semanas), subaguda (de 6 a 12 semanas) o crónica (más de 12 semanas).

Síntomas

La característica principal de la lumbalgia es un dolor punzante y generalizado en la parte baja de la espalda.

Si la lumbalgia se debe a causas mecánicas, como la degeneración del disco vertebral, osteoporosis o escoliosis (modificación de las curvas normales de la columna), el dolor aparece al estar de pie o si se tienen posturas incorrectas durante demasiado tiempo. En cambio, si las causas son inflamatorias, el dolor suele aparecer por la noche, y la situación mejora si se tiene actividad y movimiento.

Factores que pueden agravar esta dolencia

  • Edad: En adultos jóvenes, el dolor lumbar suele estar provocado por una distensión de los músculos de la espalda o por una hernia discal, mientras que en el caso de adultos mayores de 60 años es más habitual que el dolor esté provocado por la degeneración de las articulaciones o por una fractura.
  • Sobrepeso u obesidad
  • Sedentarismo
  • Adquisición de malas posturas de forma prolongada
  • Esfuerzos físicos inadecuados
  • Problemas relacionados con el embarazo
  • Curvaturas de la columna vertebral
  • Infección del riñón o cálculos renales
  • Enfermedades que afectan los órganos reproductores femeninos, como endometriosis o quistes ováricos
  • Infección crónica pulmonar, urinaria o cutánea
  • Historia de inmunosupresión (trasplante, VIH)
  • Tratamiento prolongado con glucocorticoides

Prevención del lumbago

  • Evitar el sobrepeso
  • Evitar el calzado de tacón alto, no más de 4 o 5 cm
  • Evitar estar de pie o sentado durante períodos prolongados de tiempo, así como posturas o movimientos que generen dolor.
  • Ajustar la mesa de trabajo a una altura adecuada a la estatura. Usar sillas con respaldos rectos o con apoyo en la parte baja de la espalda que permitan reclinarse según se desee. Debemos sentarnos de manera correcta formando un ángulo de 90 grados entre los muslos y la espalda.
  • Para conducir, es mejor sentarse derecho y mover el asiento hacia delante lo suficiente para no tener que inclinarse hacia delante para alcanzar el volante y los pedales. Si se va a conducir durante mucho tiempo, sería recomendable poner un cojín o una toalla enrollada en la parte baja de la espalda para aliviar el dolor
  • Realizar ejercicio de forma regular, tanto aeróbico (bicicleta) como otros más específicos para el estiramiento de los músculos como yoga o pilates. También es aconsejable nadar y caminar.
  • Levantar los objetos correctamente, agachándose para recogerlos, manteniendo la espalda derecha y sosteniendo el objeto cerca del cuerpo.
  • No cargar objetos pesados. Siempre es mejor intentar empujarlos para desplazarlos, en vez de levantarlos.
  • Dormir en una posición cómoda sobre un colchón firme. La mejor postura para dormir sería de lado, con las rodillas flexionadas y una almohada entre ellas. Si se duerme de espaldas, colocar una almohada pequeña debajo de la parte baja de la espalda. Evitar dormir boca abajo, a menos que se ponga una almohada debajo de la cadera.

Medidas terapéuticas

Reposo en cama, aunque debe ser lo más corto posible.

Masajes: No existe evidencia acerca de los efectos positivos del masaje como terapia única y de primera elección en el dolor lumbar.

Higiene postural: Evitar la sobrecarga de la espalda. Conviene conocer y aplicar normas de higiene postural.

Ejercicio terapéutico: Los ejercicios de flexión (ejercicios de Williams) están recomendados en los pacientes con lumbago crónico.

Aplicar calor o frío en la zona dolorida. En general, el frío se aplica inmediatamente después de la lesión y el calor en la reagudización de las dolencias crónicas.

En caso necesario, el médico podría prescribir analgésicos antiinflamatorios, útiles para reducir el dolor, incluso puede ser necesario emplear relajantes musculares para eliminar la contractura y el espasmo.

La cirugía podría ser una opción para casos de más de dos años de lumbalgia crónica en los que hayan fracasado todas las medidas conservadoras y exista una enfermedad degenerativa discal.

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