Consejos de tu farmacéutico sobre medicamentos que afectan a la capacidad de conducción
Contenido principal
Los accidentes de tráfico se han convertido en un problema de salud y así lo indica el Plan de Acción sobre la Seguridad Vial desde el año 2006, y muchos de los accidentes que suceden en la carretera están relacionados...
Los accidentes de tráfico se han convertido en un problema de salud y así lo indica el Plan de Acción sobre la Seguridad Vial desde el año 2006, y muchos de los accidentes que suceden en la carretera están relacionados con el alcohol, las drogas y el consumo de ciertos medicamentos.
Para continuar reduciendo los accidentes de tráfico y la mortalidad en las carreteras es importante estar informados de la acción que los medicamentos pueden provocar sobre la conducción.
Los conductores en general, quienes tomen varios medicamentos a la vez o incluso las personas con patologías de especial riesgo, como por ejemplo insuficiencia renal o diabetes, deben tener especial cuidado a la hora de conducir tomando medicamentos.
En España, desde el año 2007, es obligatorio que en el cartonaje de todos los medicamentos que afectan a la capacidad de conducir incluya un pictograma que lo indique.
La presencia de este pictograma no prohíbe la conducción a la persona que toma ese medicamento, pero nos alerta para que leamos las advertencias sobre la conducción recogidos en su prospecto.
La Agencia Española del Medicamento y Productos Sanitarios (AEMPS) elabora un listado de consulta en su página web de los medicamentos que pueden afectar a la capacidad de conducción.
Entre los medicamentos que pueden disminuir la capacidad para conducir, cabe destacar los utilizados para el tratamiento de los trastornos del sueño, ansiedad, psicosis, depresión, demencia, epilepsia, párkinson, dolor, migrañas, alergias, afecciones oculares, gripe y catarro. También hay medicamentos que podemos adquirir sin receta que pueden tener efecto sobre la conducción, por eso es muy importante consultar con su farmacéutico.
Es importante saber que los efectos de la medicación se manifiestan de manera más intensa al inicio del tratamiento, por eso siempre que se inicie un nuevo tratamiento o le cambie el médico la dosis de un fármaco o planta medicinal, debemos consultar el prospecto o a su farmacéutico el efecto sobre la conducción.
Si observamos que el medicamento influye en nuestra capacidad para conducir deberíamos dejar de hacerlo mientras estemos con ese tratamiento, pero no debemos dejar de tomar la medicación sin consultar con un médico o farmacéutico.
Hay ocasiones en las que podemos encontrar, al consultar con el especialista, una alternativa de tratamiento que no afecte a nuestra capacidad para conducir, como por ejemplo,cambiando la dosis, la vía de administración o la hora de las tomas (por ejemplo, con una dosis única nocturna).
Aunque sepamos que el alcohol es incompatible con la conducción segura, asociar alcohol y medicamentos puede agravar la somnolencia o la pérdida de reflejos.
Ante cualquier duda consulta con tu farmacéutico para que le resuelva cualquier problema sobre la medicación que estás tomando y sus efectos sobre la conducción.
Post destacados
-
Consejos para un invierno saludable
Estar preparados para el invierno es fundamental para poder vivir una temporada invernal libre de resfriados, gripes e infecciones. Por ello te dejamos 5 claves para pasar un invierno de forma saludable.
-
Caducidad de medicamentos: todo lo que necesitas saber
La caducidad de los medicamentos es una medida clave para garantizar su seguridad, calidad y eficacia. La fecha de caducidad indica el período durante el cual el medicamento mantiene al menos el 90% de su principio activo, sin alteraciones físicas ni contaminación microbiana.
-
Embarazo y deporte, consejos de tu farmacéutico
La OMS define la actividad física como “todo movimiento corporal producido por los músculos esqueléticos que requiere consumir energía”. Entre las actividades físicas más comunes cabe mencionar: caminar, montar en bicicleta, practicar deportes y participar en juegos y actividades recreativas.
Fin del contenido principal