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Millones de personas hemos sufrido alguna vez dolores a consecuencia de una lumbalgia, una tortícolis, afecciones vertebrales degenerativas u otras afecciones traumatológicas. Es bastante probable que en algún momento nos hayan recetado Myolastan, un fármaco que actúa como relajante muscular...
Millones de personas hemos sufrido alguna vez dolores a consecuencia de una lumbalgia, una tortícolis, afecciones vertebrales degenerativas u otras afecciones traumatológicas. Es bastante probable que en algún momento nos hayan recetado Myolastan, un fármaco que actúa como relajante muscular capaz de aliviar los síntomas de esas dolencias.
Las cifras de consumo de este medicamento en España indican un uso elevado y, en muchos casos, prolongado. Actualmente, a los pacientes que estén utilizando Myolastan se les aconseja acudir a su médico para consultar una alternativa terapéutica y seguir tratando sus dolencias.
Para que estos pacientes puedan consultar a su médico y, en caso necesario, se les suspenda la medicación de forma adecuada, la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios ha decidido suspender la comercialización del fármaco a partir del próximo 1 de julio. Desde esa fecha, no podrán recetarse más tratamientos con Myolastan, ni dispensarse en las oficinas de farmacia.
Su retirada se produce después de 46 años desde que se autorizó su comercialización. El motivo de la suspensión se debe a que, tras una revisión por parte de la Agencia Europea del Medicamento, el balance entre sus beneficios y sus riesgos no es favorable, ya que se le asocia un riesgo de aparición de reacciones cutáneas, que ocasionalmente pueden llegar a ser graves. A partir del 1 de julio, hay que devolver a través de los canales de distribución habituales las existencias disponibles de Myolastan que se encuentren en las farmacias y almacenes de distribución.
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