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Este martes 13 de junio se conmemora el Día Mundial contra el Cáncer de Piel, cuyo fin es sensibilizar a la población sobre la importancia de la prevención y fomentar unos buenos hábitos que ayuden a evitar esta enfermedad, uno de los tipos de cáncer que más ha aumentado en las últimas décadas.

Las estimaciones facilitadas por la Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM) indican que se diagnosticarán más de 8.000 nuevos casos durante este año en nuestro país.  En todo el mundo, se diagnostican 132.000 melanomas anualmente y 3 millones de casos de cáncer de piel no melanoma.

El cáncer de piel se origina por el crecimiento descontrolado y anormal de las células cutáneas. La radiación ultravioleta del sol, los aparatos de bronceado artificial, además de factores genéticos y otros factores de riesgo  son los principales responsables de este tumor. 

Los 3 tipos más frecuentes de cáncer de piel son el carcinoma basocelular (afectación de las células basales), el carcinoma espinocelular (multiplicación de las células escamosas) y el melanoma (crecimiento descontrolado de los melanocitos), siendo este último el menos común, pero el más agresivo y peligroso de los tres.

Los síntomas del cáncer de piel son variados. Hay que prestar atención a cambios en la piel. Estos cambios pueden ser una nueva lesión en la piel, llagas y costras que no terminan de curarse, cambios la textura y color de la piel, cambios en un lunar…

Detección temprana

La detección temprana del cáncer de piel aumenta la probabilidad de que el tratamiento sea exitoso. Los principales tratamientos se basan en cirugía, radioterapia, quimioterapia, inmunoterapia y terapias dirigidas.

El cáncer cutáneo es el más prevenible, pudiendo reducir número de casos si se llevan a cabo una serie de estrategias preventivas como:

• Evitar quemaduras solares (principalmente en la infancia y juventud).
• Evitar la exposición prolongada y reiterada al sol, especialmente en las horas centrales del mediodía.  
• Usa fotoprotector solar durante todo el año, en todo el cuerpo, incluido los labios y las orejas. Factor de protección solar de 30 SPF o más, que proteja frente a la radiación de los rayos ultravioleta A (UVA), rayos ultravioleta B (UVB) e infrarrojos A (IR-A).
• Uso de ropa protectora, adecuada en cada circunstancia, uso gafas solares, uso de sombreros…
• Autoexploración: revisar la piel para detectar cambios sospechosos. Además, hay que reconocer si algún lunar sufre cambios, para lo cual se puede seguir la regla ABCDE: Asimetría, Bordes irregulares, Color, Diámetro y Evolución del lunar.
• Acudir a revisiones dermatológicas anuales o ante la mínima sospecha.

Proteger es prevenir

A pesar del incremento de este tipo de cáncer, también es el tumor más prevenible y, cuando se detecta y trata a tiempo, tiene buen pronóstico. Algunos países, de cara a proteger a su población frente al crecimiento de este tipo de cáncer, han aplicado algunas medidas preventivas pioneras.

Este es el caso de los Países Bajos, que ofrecerá este verano protección solar gratuita a todos sus ciudadanos en un intento de combatir los niveles récord de cáncer de piel en el país. Para ello, el Gobierno ha dispuesto gratuitamente dispensadores de crema solar en colegios y universidades, festivales, parques, instalaciones deportivas y espacios públicos abiertos de todo el país.

• Claves para una detección temprana del cáncer de piel