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El presidente del Colegio Oficial de Farmacéuticos de Madrid, Luis González Díez, reprocha a las autoridades sanitarias que el Gobierno central no se haya apoyado en los farmacéuticos y en la red de oficinas de farmacia para luchar contra la pandemia. “Los farmacéuticos hemos colaborado hasta donde nos han dejado”, sostiene en una entrevista publicada en el Anuario 2020-2021 de IM Farmacias.

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En palabras de Luis J. González Díez, “me quedo con ese coraje y esa actitud. Su enorme fortaleza para sobreponerse a todas las calamidades que hemos padecido y, sobre todo, para estar cuándo y dónde se nos necesitaba, siempre al lado de los ciudadanos”.

Los farmacéuticos llegan al verano con el mismo cansancio que la ciudadanía después de tanto tiempo en tensión, y cumpliendo normas que son para todos difíciles de mantener en el tiempo, pero totalmente necesarias. “Creo que hay una sensación agridulce. Por un lado, de satisfacción por el deber cumplido, pero también se percibe malestar y cierto hartazgo por la falta de reconocimiento y por los muchos obstáculos que nos hemos encontrado cuando hemos propuesto soluciones profesionales en la detección de contagios, o ahora en la campaña de vacunación”, manifiesta González.

Esta falta de reconocimiento y el poco margen de acción que han tenido los farmacéuticos genera mucho malestar, provoca preguntas y lleva a la necesidad de reflexión por parte de los responsables sanitarios, “porque son ellos quienes tienen que rendir cuentas ante los ciudadanos y contestar por qué no se han utilizado todos los recursos sanitarios al alcance para detectar contagios o vacunar a la población cuanto antes. ¿El fallo? Probablemente tengamos que incidir más como profesión en el marco regulatorio, de modo que podamos desarrollar nuestro potencial profesional al servicio del sistema sanitario, o vencer algunas resistencias políticas y corporativas que nada tienen que ver con la salud de los ciudadanos. Los farmacéuticos hemos tendido la mano y hemos colaborado hasta donde nos han dejado. No cabe hacernos ningún reproche durante este último año”.

Carencias

Esta colaboración podría haber sido mucho mayor durante la vacunación, tal y como manifiestan desde el COF Madrid. “Los farmacéuticos madrileños hemos demostrado que estamos en condiciones de vacunar a la población. Lo hemos hecho con 12.000 compañeros y en coordinación con el equipo de médicos y enfermeros. Es una prueba de que muchas oficinas de farmacia están preparadas para convertirse en puntos de vacunación seguros en el futuro, como ocurre en muchos países de nuestro entorno. Es una oportunidad que no se puede desperdiciar”.

También señalan que la coordinación con Atención Primaria sigue siendo una asignatura pendiente, y la necesidad de integrar a la farmacia en el sistema de salud a todos los niveles asistenciales. “En el futuro, hay que trabajar en protocolos de trabajo y en nuevos canales de comunicación que nos permitan colaborar y coordinar los esfuerzos de los distintos profesionales sanitarios para garantizar una atención integral de los pacientes”, concluye González.